Tal y como comentábamos en el post 1, seguimos detallando las principales conclusiones del estudio sobre la evaluación del liderazgo en empresas 2021 (3ª edición).
La gran mayoría de las empresas utilizan los resultados de la evaluación del liderazgo para promociones internas.
Se trata además de una tendencia en crecimiento a lo largo de las anteriores ediciones de este estudio. Este año, el 81% de las organizaciones participantes utilizan estas evaluaciones para tomar decisiones acerca de promociones internas, al menos para una parte de sus empleados, y el 44% para todos ellos.
Del análisis sectorial destaca el sector de Construcción-Energía-Utilities, del que el 88% de las empresas afirman aplicarlo para todo el mundo, muy por encima de la media general (47%), así como el sector Financiero-Seguros, que se encuentra rezagado en esta práctica ya que todavía el 25% de sus empresas no emplean los resultados de la evaluación para promociones internas.
Algo parecido ocurre con las empresas cuya matriz se encuentra en Latinoamérica, de las que aún el 33% no tienen en cuenta los resultados para promociones.
Nuestra visión
¿Para qué realizas la evaluación del liderazgo? Creo que es una pregunta previa a la puesta en marcha de cualquier proceso de este estilo. Hay que tener muy en cuenta que genera unas expectativas y que supone un esfuerzo para la organización.
Los datos que se obtienen son muy relevantes y creemos que lo primero que debería hacerse es definir con quién lo haces. ¿Quiénes van a ser las personas involucradas en esta evaluación? Sabiendo el para qué y el quiénes, algo hay que hacer con esta información.
A través de herramientas como el aLEM® disponemos de informes individuales y de informes grupales en los que se recogen las áreas de mejora en elementos específicos relacionados con el liderazgo. Dentro de los informes se tiene un apartado con un plan de acción que se puede poner en marcha de forma inmediata, tanto de forma individual como en grupo (en función de lo observado colectivamente).
Consideramos necesario que los informes individuales se complementen con una “devolución” especializada por parte de quienes mejor conocen la herramienta, de forma que se comprenda en profundidad el resultado de la evaluación.
El liderazgo se trabaja de forma experiencial, con lo que para evolucionar, creemos que es necesario facilitar el aprendizaje a través de nuevas situaciones en el día a día laboral con nuevas responsabilidades, nuevos retos de gestión de equipos, nuevas pertenencias a otro tipo de equipos. Esto, más allá del auto aprendizaje, debe suponer algún tipo de “promoción” sea formal o informal.