Equipos exhaustos, el futuro incierto, la falta de flexibilidad o la vida del empleado más allá del trabajo son algunos de los nuevos retos con los que se encuentran las empresas y los responsables en este tercer año de pandemia.
En abril también leemos sobre algunos de los beneficios del teletrabajo, que ha reducido el número de bajas, nuevas formas más eficientes de contratar, el trabajo del futuro y hasta la importancia de la cámara en las videollamadas como indicador de compromiso.
Titulares de las noticias de España
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- Nuevos retos para las empresas y los responsables de equipos en la gestión del trabajo híbrido: flexibilidad y rotación no deseada
- Los efectos positivos del teletrabajo en la salud del empleado: disminuyen las bajas por enfermedad
- Los nuevos procesos de selección serán más rápidos y eficientes
Las noticias Internacionales tratan de:
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- Nuevos retos para los líderes: adaptación a la incertidumbre, paliar el desgaste de sus equipos y evitar que rotación no deseada por falta de flexibilidad
- La salud y el well-being de los empleados escala puestos en la lista de prioridades, tanto de los propios empleados como de sus empresas
- Nuevas formas de trabajo y nuevas tecnologías, con una mayor importancia a la parte humana
- La persona como centro de la empresa: nuevas y más eficientes formas de contratación, relevancia del onboarding e importancia de las dos caras del empleado, en el trabajo y fuera del trabajo
1- Sección nacional
En los “transitorios” o momentos de ajuste, se producen alteraciones que se van acomodando sin que sepamos cuál va a ser el resultado final. Parece que esto es lo que está ocurriendo con las nuevas formas de trabajo híbridas. ¿Flexibilidad ordenada o descontrol en las cargas de trabajo? Muy relevante el rol de los responsables de equipos para que no se traduzca en un burnout.
Ya tenemos uno de los extremos del continuo que se está creando en el ámbito de los modelos de trabajo híbridos: permitir a los empleados vivir y trabajar desde donde quieran siempre dentro del mismo país y desde el país que quieran, pero sólo durante un máximo de 90 días al año, todo con el mismo salario.
Parece que el teletrabajo puede influir positivamente reduciendo el número de bajas laborales por la posibilidad de poder trabajar cuando se tiene una dolencia leve. No solo se ha visto en EEUU, UK y China, sino también en España.
El principal motivo para dejar el trabajo es la falta de flexibilidad laboral, los españoles alegan que el trabajo no es su única prioridad y que quieren dedicar tiempo a desarrollar otros aspectos de su vida.
El ciclo del talento sigue su evolución con las nuevas generaciones y las nuevas tecnologías. No solo hay que hacerlo bien sino que también rápido para estar en primera línea en la lucha por el talento.
2- Sección internacional
En tiempos de cambio, los equipos que mejor se adaptan son aquellos que despliegan un liderazgo que no solo se adapta a las nuevas condiciones sino que transforman su forma de trabajar a través de una adaptabilidad radical. ¿Cómo? Colaborando de forma inclusiva, gestionándose de forma ágil, promoviendo la resiliencia en los equipos, y desarrollando una visión hacia el futuro y lo que pueda venir.
Los líderes deben tener en cuenta la situación emocional de sus equipos, sobre todo empezando el tercer año de pandemia. Hay algunas claves para ayudar a mejorar y paliar el desgaste: ten en cuenta que eres un modelo a seguir, aligérales la carga y el ritmo que llevan, crea un entorno de seguridad cognitiva, y haz que todo tenga sentido.
Para fidelizar el talento las empresas pueden enfocarse a las actividades preferidas por sus empleados fuera del trabajo y promoverlas, facilitarlas, incluso financiarlas. Los líderes que las promueven deben también dar ejemplo con ellas.
¿Sienten los trabajadores que es más seguro ser autónomo que empleado por cuenta ajena? Parece que la tendencia es esa desde hace años y que la pandemia lo ha acelerado, con lo que se sugiere ofrecer más flexibilidad, mostrar el valor de pertenencia, dar oportunidades para ser más empleable, y contratar más gente independiente.
Para que la semana laboral de 4 jornadas consiga los beneficios que se le suponen en productividad y fidelización, hay que poner atención a cómo ponerla en marcha teniendo en cuenta todas las características y necesidades de la empresa.
Para mejorar la productividad y la felicidad laboral de las personas que trabajan en remoto, hay que primero conocer las variables que afectan a ese resultado y, después combinarlas de manera óptima en función de los perfiles en nuestra empresa. Esto es un trabajo que va en contra la “vagancia organizacional” mostrada por muchas empresas que se “quitan este marrón de encima”.
En estos momentos de incertidumbre conviene no sobrevalorar la resiliencia. Hay algunos elementos complementarios que conviene considerar como institucionalizar el bienestar, mirar los logros conseguidos como equipo, utilizar sabiamente las reuniones uno a uno, comprender que puede haber diferentes expresiones emocionales, y crear un lenguaje común.
El proceso de inducción o acogida (onboarding) es vital para la fidelización de los empleados. Para ello hay que estructurarlo de una forma estratégica y dotarlo de los elementos que nos permitan monitorizarlo y mejorarlo, más en un entorno híbrido.
Después de dos años de pandemia, nos encontramos en un momento en el que tanto los líderes como los empleados están intentando dar sentido en cómo la experiencia les ha cambiado e imaginando qué es lo que vendrá después. Las personas estamos más mirándonos hacia dentro con nuestros hábitos y habilidades, las empresas mirando hacia afuera y viendo qué ocurre en el mercado y, de forma global, el impulso del cambio está aumentando.
Cuando tienes una reunión en remoto, ¿enciendes la cámara? De cara al futuro, se acabó tener la cámara apagada ya que se ve como una falta de compromiso y se usa como factor determinante de retención a largo plazo.
¿Estamos abocados a trabajar cada vez menos en tareas de cada vez más valor añadido? ¿Cómo compaginamos necesidad con propósito?
Más que nunca en este mundo híbrido hay que plantearse el trabajo en equipo tal y como lo conocíamos hasta ahora y equilibrar el esfuerzo de la motivación y coordinación con los beneficios de la colaboración. Necesitamos evolucionar hacia el siguiente nivel en esta transformación que vivimos y compaginar el yo y el nosotros igual que el presencial y remoto.
¡Buenas lecturas y hasta el mes que viene!